Jenny Lloyd /Reino Unido

Artista y diseñadora del Reino Unido, se graduó en Falmouth College of Arts en 2004 y originalmente se formó y trabajó durante más de quince años como ilustradora y diseñadora gráfica, con una extensa lista de clientes globales. Sin embargo, más recientemente, su duradera obsesión con la cultura visual la animó a comenzar a integrar el collage en su portafolio, uno de los desarrollos más divertidos y gratificantes de su carrera creativa hasta el momento. Jenny ahora crea ilustraciones de collage digitales y hechas a mano para libros, revistas, joyas, diseños de patrones de superficies y otras obras de arte y encargos personalizados, todo desde el estudio de su casa en Ámsterdam.
Durante el último año, el trabajo de Jenny ha aparecido en la revista Photo Trouvée, la revista Suboart, la revista Contemporary Collage, Wilder 'Roam' y en la portada del número 2 de 'Cut Loose', entre otras; además de aparecer en Create! Artículo de la revista, "Descubre 20 artistas de collage contemporáneos que debes seguir ahora". Ha aparecido en entrevistas de Wilder Collage, Toombes.com y Twin Cities Collage Collective, y en un episodio de podcast para Flying Fruit Bowl. A Jenny le encanta combinar lo vintage y lo moderno para crear mundos coloridos, maximalistas y escapistas, donde nuevas historias y sentimientos frescos emergen para ser explorados, y cada pieza tiene un espíritu propio.

Statement
El amor de Jenny por el collage proviene de muchas cosas. En primer lugar, una atracción por la curación: el proceso de reunir elementos dispares para formar un todo coherente. Le produce una gran alegría reunir fragmentos de la vida cotidiana, combinarlos con libros de arte olvidados hace mucho tiempo y otros materiales preciados, y dar nueva vida a piezas hechas de materiales que normalmente pasarían desapercibidos o serían desechados. Jenny está cautivada por la necesidad humana de conectarse con la naturaleza y nuestro medio ambiente, y se esfuerza por crear un trabajo que refleje y respalde ese sentimiento. A menudo se le recuerda nuestra existencia efímera, y su práctica continua sirve para despertar recuerdos, momentos perdidos en el tiempo; reuniendo imágenes del pasado para ayudarla a mirar hacia el futuro. Por encima de todo, aspira a aportar suavidad, alegría y magia a su arte: una sensación de comodidad y asombro.
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